"La educación es el más importante escalón para mi libertad", se
lee en la cartelera del aula del Primero de Bachillerato 'B" del Colegio
Eugenio Espejo, unidad educativa que funciona al interior del Centro de
Rehabilitación Social (CRS) de Varones No, 1 de Guayaquil, conocido
como Expenitenciaría del Litoral, donde al igual que en los otros CRS
del país, la educación es un eje fundamental con miras a la efectiva
rehabilitación de las personas privadas de libertad (PPL).
"Este
es un proceso integral en el confluyen varias instituciones, y gracias a
este trabajo coordinado, seis mil PPL tienen la oportunidad de
integrarse al sistema educativo, y junto con ellos, seis familias tienen
la oportunidad de reinsertarse, ese es el reto y continuamos firmes en
este proceso de transformación", enfatizó durante su intervención Ledy
Zúñiga.
Actualmente en los centros
penitenciarios del país, a través del sistema de Educación Básica
Elemental y el Programa de Educación Básica para Adultos y Jóvenes
(EBJA) se atiende a 607 PPL, en Educación Básica Media (correspondiente a
los años de tercero a séptimo de básica) participan 2205 internos e
internas, Educación Básica Superior, que contempla los niveles de octavo
a décimo año, incluye a 1616 PPL y el bachillerato de primero a tercer
año a 582.
Es decir, en el sistema educativo
ecuatoriano se han insertado 5013 personas privadas de libertad lo que
constituye en este momento el 20% de la población penitenciaria, sin
embargo en el mes de agosto se ampliará esta cobertura con el inicio del
nuevo semestre en educación básica media.
"La
posibilidad de que los privados de libertad estudien no es un acto de
caridad ni cosa parecida. Por el contrario, es la obligación cumplida a
cabalidad por un Estado incluyente y democrático que busca la paz social
en armonía con sus ciudadanos y no en conflictos estériles", señaló en
el evento inaugural la titular de Justicia.
Por
su parte, Augusto Espinosa se refirió a la segunda oportunidad que
reciben las PPL por parte del Estado y de la ciudadanía. "Invitar a que
esta sea una decisión que implique un cambio profundo en la vida de cada
uno de ustedes. Al tomar la decisión de acceder a estudios, ustedes ya
están haciendo algo diferente para obtener resultados positivos en su
vida, la de sus familias y para beneficio del país", afirmó Espinosa
comprometerme a que su educación sea educación de calidad.
Para
Luis M., estudiante del primero de bachillerato que cumple su fase de
privación de libertad en la Expenitenciaría, por primera vez un Gobierno
ha propuesto acciones concretas en beneficio de la población
penitenciaria. "Estamos muy agradecidos con las autoridades por
brindarnos esta oportunidad de educarnos con dignidad y ayudarnos con
nuestra rehabilitación, oportunidad que nos permitirá reinsertarnos como
entes productivos a la sociedad".
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