Personas que cometieron diferentes
tipos de delitos comparten micrófono en los centros penitenciarios. Esta
afición al canto las libera, las transporta a sus sueños y sobre todo las
transforma en esa lucha diaria que reivindica los errores del pasado, aquella
que recibe el nombre de rehabilitación.
Son las Duha, una agrupación musical
formada por cinco mujeres del Centro de Rehabilitación Social (CRS) Regional
Cotopaxi. Ellas, además de demostrar sus talentos en el escenario, se
convierten en un ejemplo del cambio que impulsa el Ministerio de Justicia,
Derechos Humanos y Cultos.
Bajo la mirada firme del CRS, los
ensayos no cesan. Sopranos, mezzosopranos y contraltos forman la melodía
adecuada de este grupo femenino que pese a sus cortas o largas sentencias,
encontrarán en la música y el canto su porvenir.
“Cada tema es interpretado con
sentimientos encontrados que nos hacen pensar en los seres que viven en
nuestros corazones. Somos personas que no hemos perdido la sensibilidad ni las
esperanzas, que buscamos la tan ansiada libertad en cada preparación para ser
mejores”, expresa Dayanara C., integrante.
Surgimiento de su historia musical
Hace cinco años, un 18 de abril, nace
el grupo musical Duha, con el apoyo de esta Cartera de Estado, a través del
Gestor Cultural de la Fundación Anaymayu.
Sus primeras integrantes fueron Flor
A., Susana A., Renata F. y Grace A. que le dieron una categoría especial a esta
agrupación; no solo por sus voces, sino porque en cada presentación denotaban
sentimiento y valor.
Algunas mujeres que integraban este
proyecto recuperaron su libertad, pero la insignia continuó con voces como las
de Dayanara C., Érika L., Estefanía B., Rosa T. e Isabel U., grupo que se
mantiene hasta la presente fecha.
“Somos mujeres que amamos el canto
tanto como a nuestra vida, que buscamos que la sociedad no nos juzgue por el
pasado y nos ayude a enrumbarnos en el presente que lo construimos a diario”,
comenta Isabel.
Presentaciones que marcaron su
proceso de rehabilitación
Este talento musical ha tenido
alrededor de 25 presentaciones tanto dentro como fuera del CRS Cotopaxi. Entre
estas se destacan el Festival Musical en el parque La Carolina en Quito, en seminarios
del Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, en el Día de la Policía,
entre otros.
Las cinco personas privadas de
libertad salen apuradas, no se trata de sus libertades, sino de salidas
transitorias. En cuestión de horas deben movilizarse de una ciudad a otra.
En sus manos llevan las letras de sus
canciones, porque en cada viaje repasan una vez más antes de subir al escenario
en donde las esperan personas de distintas edades que desconocen el talento que
existe dentro de un centro penitenciario.
Sorprende saber que en un lugar así
surgen talentos musicales, que pese a no ser reconocidos, quienes escuchan sus
presentaciones llevarán grabado en sus mentes estos logros a los que han
llegado las personas que están “presas” de su libertad, mas no de su derecho a
expresarse y mostrar sus deseos para salir victoriosas.
Emblema musical de las Duha
“Gente de paz” es el tema musical
escrito por el Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, canción que
se ha convertido en el tema oficial de esta entidad gubernamental.
Sus presentaciones son los espacios
culturales perfectos en los que buscan reivindicarse con la sociedad, además de
apoyar a Ecuador en su lucha contra la violencia de género.
“Es hora de demostrar que las
autoridades hacen un gran esfuerzo para apoyar nuestros proyectos, por lo que
nuestra mejor forma de retribuir su trabajo es comprometiéndonos con ese
verdadero cambio para no volver a infringir la ley y ser el ejemplo del
mañana”, finaliza Érika L.
